lunes, 24 de septiembre de 2012

Recuerdo, certeza y presentimiento




















Uno de los muchos azulejos con frases que lucen en las paredes del bar "La Campana", donde se sirven los mejores bocadillos de calamares de todo Madrid.

domingo, 2 de septiembre de 2012

Matar a uno, matar a miles

Ya lo planteaba Tolstoi en su magnífico ensayo El Reino de Dios está dentro de vosotros, al igual que Charles Chaplin en su obra maestra Monsieur Verdoux. Matar a un solo hombre, a una sola criatura, está considerado como lo que es: un auténtico horror, un crimen, una aberración. Sin embargo, matar a decenas, a cientos o a miles de personas a la vez, puede llegar a ser considerado como un acto heroico, una gran victoria bélica o guerrillera, o cuando menos un simple "efecto colateral".

Gracias por el día futuro en el que desaparezcan la ceguera y la hipocresía, por el bien de todos...

Hay mucho poder encerrado dentro de nosotros

Como personas que transitamos pacientemente por nuestro día a día, seguimos siendo criaturas pequeñas y limitadas, con nuestras luchas, nuestros temores, nuestras luces y sombras. Pero hay algo vivo y maravilloso dentro de nosotros, algo que trasciende nuestra habitual forma de ser y de pensar, un tesoro que está esperando ser descubierto y expresado.

La misma Energía que lo impulsa y lo impregna todo, que da color a los colores, que hace vibrar a los átomos, que produce el movimiento de océanos, vientos, planetas y galaxias; la misma Energía que late en cada ser vivo, que sostiene nuestra respiración y el latido de nuestros corazones; la misma Energía que hace viajar a la luz y que se manifiesta como amor y belleza incondicionales por todas partes en el Universo y en nuestro mundo: esa misma Energía somos nosotros, y podemos tomar conciencia de ello, experimentarla y manifestarla si sabemos descubrir cómo.

Al hacerlo nuestra pequeña personalidad con todas sus fabulaciones, temores y problemas habituales se diluye, y todo se desarrolla naturalmente de una forma pacífica y armoniosa, para nosotros y nuestro entorno. El "yo, yo y más yo" deja de tener sentido, y el "dónde, cuándo y cómo" también. Solo importa el momento presente y nuestra alegría por estar disponibles para él, y actuar en él.

La vida es hermosa, una bendición. No nos resistamos más a ella. Somos Luz.

(Descubrir el sentido de todo esto es una aventura personal, diferente para cada uno de nosotros, que merece la pena ser vivida. ¡Disfrutemos del camino mientras buscamos, amamos y experimentamos!).